Son cinco oficiales PN acusados matar secuestradores de Eduardo Baldera Gómez
MONTECRÍSTI. El sacerdote Tony Ramos, de la parroquia San Fernando en esta ciudad, denunció que cinco oficiales de la Policía Nacional, a los que le impusieron medidas de coerción por el asesinato de los supuestos secuestradores de Eduardo Baldera Gómez, no se encuentran recluidos en el recinto de la fortaleza San Fernando de esta ciudad, en un vulgar desacato a la decisión judicial del pasado lunes.
La jueza Javielka Gómez, del Juzgado Permanente de la Instrucción del Departamento Judicial de Montecristi, impuso tres meses de prisión contra el teniente coronel Alberto Trejo Pérez; mayores Rafael Tejada Tejada, Franklin Santana Martínez y los segundos tenientes José Luís Peralta Valentín y Catalino de Jesús Pérez, por violación a los artículos 295 y 304 del Código Procesal Penal.
De acuerdo al religioso, esa decisión no ha sido acatada en una franca violación del poder militar contra el poder judicial, consideró el cura católico, señalando que tres personas de su entera confianza le proporcionaron la información, la que trató de confirmar en el recinto de la fortaleza San Fernando donde fueron enviados los imputados “y nos han confirmado que allí no están”.
“Aunque fueron enviados, nunca llegaron al recinto, a la decisión de la jueza no le hicieron caso, no tiene validez según el poder policial; estamos entrando, que como ya lo han dicho algunas personas, en un narco Estado, es decir en una ingobernabilidad; hay gobiernos para algunos, los hijos de Machepa tienen que pagar en la cárcel, pero hay unos que...nada todo da igual.
“Esperamos que sobre lo que estamos denunciando, se levante una investigación en torno a todo esto”, comentó el presbítero ayer (miércoles) en su programa “Dialogo de Amigos” que produce de 4 a 5 de la tarde a través de Radio Montecristi.
Ramos hizo un llamado a los magistrados Ramón Arístides Madera Arias, procurador general adjunto de la República; a la procuradora fiscal del Distrito Judicial de Montecristi, Clara Jacqueline Zapata Santos, al mayor Vinicio Hernández Méndez, representante de la Policía, integrantes de la comisión que investigó el caso de los asesinatos relacionados con el secuestro de Baldera Gómez; al igual que a Javielka Gómez, jueza que dictó la medida de coerción a que “no den a torcer el brazo, no dejarse amedrentar ni sobornar, pues es una actitud heroica la que ustedes están asumiendo”, señaló el párroco Ramos.