Verdad FE Y VIDA
Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.
En el Evangelio de San Lucas, Capitulo 18, Versículo 38, dice Jesús: “Todos los que pertenecen a la verdad me escuchan. Pilato le dijo: ¿Y qué es la verdad?
Esta misma pregunta no la tenemos que hacer hoy 2,010 años después cada uno de nosotros: ¿Qué es la verdad? Desafortunadamente en muchísimas ocasiones la verdad duele, y entonces o se calla para no herir, se tergiversa la idea de lo que en realidad es la verdad, y lo que se hace es decir una verdad a medias, que para el caso es una mentira. Con esto hay que tener mucho cuidado, porque la verdad es la verdad, y no admite más que eso.
Vivimos en una sociedad y en un mundo donde nos han acostumbrado a no decir la verdad en muchas ocasiones para evitar meternos en problemas, o para salir de algún problema. Miente el niño a sus padres para no ser regañado. Miente el esposo a la esposa o viceversa, miente el empleado cuando llama a su centro de trabajo y dice que no puede ir a trabajar porque está enfermo, tiene un hijo enfermo o cualquier otro familiar. Miente el empleador cuando ofrece a sus empleados un aumento de salario y no les da lo prometido. Mienten los padres cuando le prometen a los hijos cosas y luego no se las cumplen. Miente aquel que se postula para un cargo público y ofrece muchas cosas y cuando es electo se le olvida lo que prometió. Miente el funcionario público que fue elegido y no cumple con su cargo. Miente el periodista que se vende y no es capaz de defender y hablar lo que es verdad, y así podría seguirles mencionado una cantidad de cosas que ya ustedes bien conocen y que están muy lejos de ser verdad, pero bueno, eso es como comúnmente se pudiera decir: “Esta lloviendo sobre lo mojado” que es el repetir lo mismo de lo mismo.
Es cierto que la verdad en muchas ocasiones duele. Pero si queremos que no nos duela, tenemos que actuar y vivir acorde a la misma. Tenemos que obrar con la verdad en nuestro corazón y en nuestra mente. No podemos tener como comúnmente se dice dos caras, o sé esta con Dios o con el diablo, ahora con los dos si no podemos estar. Como dice Juan en el Apocalipsis: “Porque no eres ni frió ni caliente, te vomitare de mi boca” ¿Qué por decir la verdad muchos no nos van a querer, o no le vamos a caer bien a muchos? Eso es muy cierto, pero es mucho mejor él poder recostar la cabeza tranquilo con el saber de un deber cumplido, con el saber que hemos dicho lo que es verdad, gústele a quien le guste y pésele a quien le pese.
Decía el prócer de la libertad cubana José Martí: “La verdad nos pondrá la toga viril” Tenemos que aprender a vivir en la verdad y con la verdad cueste lo que nos cueste.
Termino con las palabras del Salmo 43, Verso 3 que dice: “Envía tu luz y tu verdad: que ellas me guíen y me conduzcan hasta tu monte santo, hasta tu morada”.
Hasta la próxima y muchas bendiciones para todos.